“Los periodistas solo somos una especie de puente”

POR: CÉSAR PICCIOTTI

Ricardo Burgos, decano del Colegio de Periodistas de Lima, conversó con nuestro canal digital La Noticia Multimedia y puso los puntos sobre las íes en el tema de la complicada relación del Gobierno con la prensa. Postuló la urgente necesidad de un media training para guiar a los nuevos políticos respecto a cómo deben conducirse con los medios, no solo para mejorar su imagen, sino también para comunicarse con la sociedad. “Los periodistas solo somos una bisagra, un puente”, expresó.

¿Cómo ve la relación del Gobierno con la prensa?

El Colegio de Periodistas de Lima ha expresado una postura respecto a este tema. En principio entendemos que este es un nuevo Gobierno que no ha tenido experiencia política en el manejo con los medios de comunicación. Sin duda, este es un trabajo del día a día. Hoy mismo, por ejemplo, hemos visto al primer ministro prácticamente atrapado en un cinturón de reporteros que intentan hacerle preguntas al paso. Esto es un fenómeno muy típico de la prensa peruana. En otros países es diferente. Por ejemplo, en Estados Unidos, en la Casa Blanca hay un ambiente, el Salón de la Prensa, donde, ya sea el vocero del Gobierno o el presidente, se dirige a los periodistas.

Justamente la negativa del presidente de dar este tipo de apertura a la prensa hace que el periodista, por esa necesidad que tiene de informar a la ciudadanía, busque estos espacios.

Sí, efectivamente. Es por eso que sería conveniente que las personas que manejan el tema de prensa del presidente de la República pudieran solucionar este problema de falta de comunicación interna. Naturalmente, los periodistas y las personas que trabajan en las áreas de imagen y comunicación pueden dar también las recomendaciones, pero ya dependerá sin duda de los personajes políticos, la actitud que toman en torno a esta necesidad cotidiana de la prensa de informar; especialmente, como se da en el caso peruano, con las entrevistas. Aquí, estas oportunidades se producen al paso, y los reporteros pugnan por preguntar, algunas veces en una forma muy desordenada, que también ha criticado el Colegio, pero en algunas otras también los personajes políticos evaden a la prensa.

Y ayer respondiendo en quechua. Los peruanos no tenemos nada contra el quechua, y, es más, desearíamos que se difunda más, pero responder de esta manera yo creo que es una provocación, una burla, ¿no?

Bueno, y no solo eso, sino que, como sabemos, la política es el arte de los gestos y de las palabras. Y, entonces, cuando el día de ayer, también en el mismo escenario, San Juan de Lurigancho, donde se produce un grave problema de desabastecimiento de agua, el primer ministro le responde a un reportero del Canal 2, que pregunta sobre el tema, llevándose los dedos a los oídos, “no escuchas, no escuchas, lávate los oídos”. Una cosa es tener un lenguaje campechano, ser coloquial y otra cosa es, digamos, faltar el respeto no a una persona que pregunta, sino a la sociedad, porque la prensa representa a la sociedad en su conjunto.

La libertad de expresión, la libertad de prensa, la libertad de opinión, son derechos inherentes a la sociedad y los periodistas solo somos esa bisagra que permite la unión de uno y otro, somos una especie de puente y, claro, la gente siente que este puente está mal construido.

Quizás algunos errores que se hayan cometido por el lado de la prensa también hacen que la opinión pública perciba que los periodistas tratan de hostilizar o de buscarle cinco pies al gato cuando entrevistan a un personaje político, pero lo cierto y evidente es –y esto lo sabemos no solo con este Gobierno sino con todos los anteriores– que el papel de la prensa no es exclusivamente de un agente de relaciones públicas de una autoridad o de un gobierno, la prensa está ahí para incomodar, para preguntar, para buscar la verdad, y ese es el terreno y ese es el trabajo que nos toca.

¿Podríamos achacarlo a una falta de preparación de los nuevos políticos? ¿O es una política que quiere imponer el Gobierno? ¿O es un “miedo escénico”, como por ahí escuché, por parte de las autoridades?

Yo no creo que sea un miedo escénico porque Castillo es un dirigente sindicalista que tiene mucha experiencia en el manejo de auditorio. Es más, yo siento que cuando Castillo habla se siente más cómodo en el discurso, se siente más cómodo en la tarima, en la manifestación. Se maneja mejor, digamos, con su auditorio.

Sin embargo, su punto vulnerable es la pregunta y la respuesta. Y entonces ahí se producen los baches, recordemos que casi todo el tiempo de la precampaña presidencial Castillo tuvo problemas lamentables con reporteros, no solamente peruanos sino internacionales, cuando le pedían que diera más detalles acerca de sus posturas y planes de gobierno. Entonces, yo no creo que sea un tema de estrategia, sino que es un tema que todavía ellos no lo están dominando. Aquí se requiere urgentemente lo que nosotros conocemos como media training, que va a facilitar que los políticos aprendan a enfrentar a los periodistas.

PLANTEA COLEGIO DE PERIODISTAS Y COMUNICADORES

Ricardo Burgos, quien es candidato al decanato del Colegio de Periodistas del Perú, planteó extender el nombre de dicha institución a Colegio de Periodistas y Comunicadores del Perú.

“No podemos permitir, como ocurrió hace algunos meses, que algunos políticos, zamarros, muy ligados a sectores universitarios, intenten crear un ‘colegio de comunicadores’ a su gusto y medida”, expresó.

Indicó que el Colegio de Periodistas es “un colegio que siempre mantiene una independencia o neutralidad frente a los gobiernos, no somos un sindicato, no somos una federación; somos una entidad deontológica”.

También plantea acabar con la llamada “ley Torres y Torres Lara, que permitió que un plomero, un gasfitero, un economista, un ‘pulpín’ o de repente un opinólogo ocupen los lugares de los periodistas y comunicadores, y desalojen a los que han estudiado la carrera en una universidad”.