El fin de semana, la Policía capturó a 61 personas, 47 de ellas de nacionalidad venezolana, con armas, drogas y celulares. Ante este logro de la Policía, no debemos olvidar lo ocurrido en el búnker de Pachacamac, donde todos los capturados por la Policía fueron liberados, un grupo por la Fiscalía y el resto por el Poder Judicial.
Este es un ejemplo de cómo, si la respuesta de la seguridad pública no es integral y articulada, solo acabará alentando la criminalidad, gracias a la impunidad. Ya basta de más de lo mismo. La Policía, la Fiscalía y el Poder Judicial deben estar articulados.
Al respecto, desde Aprosec insistimos en proponer los Módulos de Flagrancia; invitamos a los alcaldes a que faciliten un terreno o local para ello y coordinen con el Poder Judicial, Ministerio Público e INPE, para agilizar el proceso de justicia y así no queden impunes los delitos. Al final de este artículo, explicamos qué realizó Bukele en El Salvador y qué se podría implementar en el Perú.
La población debe saber que solo teniendo una clara política de Estado anti delito y trabajando de forma articulada e integral, se podrá ir sentando las bases para que gradualmente se comience a reducir el número y la frecuencia delictiva. Hay que señalar también que los alcaldes deben cumplir un rol preventivo con sus equipos de Serenazgo, orientando a sus comunidades a que tengan una actitud de evitar y no enfrentar a esta delincuencia sin escrúpulos, de manera agresiva y en un número importante de casos, con armas de fuego en sus manos.
Para la implementación de los módulos de flagrancia, las municipalidades deben coordinar, antes que nada, con el Ministerio Público y el Poder Judicial, los siguientes puntos:
– Actualizar el mapa de riesgo delictivo.
– Cuadrantes trabajados para una respuesta real.
– Buzones estratégicamente ubicados para la información (denuncia anónima).
– Equipos de serenos orientadores, para aumentar las condiciones de la “cuadra más segura”.
– Los alcaldes deberían trabajar las escuelas de padres, ante una cada vez mayor falta de crianza adecuada. Sentando así bases para trabajar también causas de los delitos.
– Planificar diversas campañas con la finalidad de determinar locales de alto riesgo para nuestros adolescentes, venta de drogas o alcohol a menores de edad, hostales informales, etc.
– Violencia y maltratos, poner rostro y nombre a los que ejerzan cualquier tipo de violencia, incluida contra nuestras mascotas.
En El Salvador, Bukele es acusado de cometer algunos abusos contra los DD. HH., en una guerra contra la delincuencia por combatir a la Mara Salvatrucha y Barrios 18, con la imposición de un estado de excepción en marzo del año 2022 que dura hasta hoy y que ha permitido la captura de más de 80,000 pandilleros.
Esta política de estado anti delito fue posible a través del cambio de los operadores de justicia. En la Fiscalía y el Poder Judicial de El Salvador, hoy el promedio de edad de fiscales y magistrados es de 35 años.
(*) Presidente de Aprosec.
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