El “mensaje a la nación” dado por Keiko Fujimori la noche del miércoles reviste una singular connotación. En la breve presentación del video que publicó en sus redes sociales dejó una frase que no ha sido muy resaltada por la prensa, pero que puede dar la pista de lo que se trae entre manos: “Volví con entusiasmo y hemos tomado una decisión importante”. ¿Cuál es esa importante decisión? Hay dos posibilidades que tendrían que ver directamente con decisiones políticas al interior de su partido, Fuerza Popular.
La primera, el desmarque del fujimorismo respecto a la presidenta Dina Boluarte, luego de esa especie de “luna de miel” con el Gobierno que fue muy criticada por los detractores de ambos. Ambas, la jefa de Estado y la lideresa de Fuerza Popular, se reunieron hacían exactamente cuatro meses en Palacio de Gobierno y la tregua que convinieron le sirvió al fujimorismo para aquilatar la conveniencia o el perjuicio que puede acarrear esa complacencia.
Todo indica que el Comando Ejecutivo Nacional de Fuerza Popular, encabezado por Keiko, quien es secundada por Luis Galarreta y Miki Torres, concluyó que el apoyo del fujimorismo a Dina Boluarte no le dejaría ningún rédito político, pues esta cuenta con una aprobación de apenas 14% y un rechazo de 77% a su gestión, según la última encuesta de Ipsos.
Keiko misma lo dijo, hay varios ministros cuestionados que posiblemente sean interpelados y censurados. Además, se cocinan marchas de protesta y la anunciada “Toma de Lima” no deja de ser una amenaza. La decisión del Ministerio de Trabajo de anularle la inscripción a la Federación Nacional de Trabajadores en la Educación del Perú (Fenatep), gremio creado expresamente por el expresidente Pedro Castillo y que es uno de los promotores de las movilizaciones en el sur del país, apunta a hacerle frente a la supuesta convulsión social que se avecinaría.
Deslindar con el Gobierno y desmarcarse del mismo es, sin duda, una jugada táctica del fujimorismo dada la coyuntura política y las opciones del régimen de salir airoso de esta coyuntura.
La otra posibilidad es que, con eso de “importante decisión”, hayan acordado que Keiko Fujimori postule por cuarta vez para presidenta de la República (ya ha perdido con Humala, PPK y Castillo). El mismo día del mensaje de Keiko, Nano Guerra-García andaba diciendo que la lideresa de su partido era “la mejor candidata”. Eso resulta sintomático y sería un indicio de que en el 2026 la tendremos nuevamente en la lista de aspirantes al “Sillón de Pizarro”. Esperamos no equivocarnos. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.
