La ofensiva de la organización criminal Hamás contra Israel comenzó el 7 de octubre con atentados terroristas que implicaron el asesinato masivo de centenares de judíos civiles, el degollamiento de bebés, la violación de mujeres, la toma de rehenes y el lanzamiento de miles de cohetes contra objetivos no militares. Pero, pese a las drásticas acciones de defensa, la guerra continúa y corre el enorme riesgo de escalar para convertirse en un conflicto regional con repercusiones mundiales. ¿Qué hay detrás?
Hamás es un grupo extremista en lo político y terrorista en la acción. Se fundó como consecuencia de un proceso largo de reacomodos en el liderazgo anti israelí. En 1959 Yasser Arafat creó Al Fatah con el objetivo de destruir a Israel, fundada en 1948. En 1964 emergió la Organización para la Liberación de Palestina (OLP).
Durante las décadas de 1960, 1970 y 1980, la OLP apeló a la lucha armada pero desde 1974 fue considerada por la Liga Árabe y por Naciones Unidas como la única organización representante legítima del pueblo palestino.
En 1982, Israel invadió el Líbano con el objetivo de eliminar a la organización palestina. La primera intifada ocurrió en 1987, cuando comenzó un alzamiento masivo contra la ocupación israelí en la Ribera Occidental y Gaza.
En 1988, la OLP declaró la Independencia de Palestina. Se estableció un gobierno en el exilio y Arafat fue nombrado como su presidente. En septiembre de 1993, Israel y Palestina firmaron los acuerdos de Oslo en Washington que condujeron a la creación de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) para el gobierno de los palestinos en Israel. En 2013, la Autoridad pasó a llamarse Estado de Palestina aunque no tiene reconocimiento pleno.
Hamás fue fundada en 1987 en el marco de la Primera Intifada. Desde su concepción tuvo como inspiración a los Hermanos Musulmanes de Egipto, y cuestiona a la OLP. Es antisemita, sostiene que hay que exterminar a todos los judíos y debe establecerse la ley de la sharia. Por eso la organización es considerada como terrorista .
En enero de 2006, bajo el liderazgo de Ismail Haniyeh, Hamas venció a la OLP en las elecciones parlamentarias. Al Fatah consiguió sostener el poder en Cisjordania, pero fue expulsado de la Franja de Gaza, que empezó a ser gobernada de facto por Hamas.
Estados Unidos y la Unión Europea exigieron tres condiciones para su reconocimiento: reconocimiento de Israel; reconocimiento de los tratados firmados por la OLP; y el cese de la violencia. Sin embargo, Hamas rechazó esas condiciones.
Al mismo tiempo, en esos años el grupo terrorista palestino alcanzó un gran fortalecimiento gracias a la colaboración de países como Irán y Qatar, y a la de otros movimientos extremistas como Hezbollah, presente en el sur del Líbano, cerca de la frontera con Israel. Hasta el día de hoy se han librado cuatro guerras entre Hamás e Israel (2008, 2012, 2014 y 2021). Gran parte de los misiles y armamento son proporcionados por Irán y por la dictadura siria . Además, excavaron cientos de túneles para infiltrarse en territorio israelí y así llevar a cabo atentados y secuestros de civiles y militares. Todo esto, con un solo fin: destruir Israel y crear un estado islámico independiente.
La única alternativa hoy es erradicar militarmente desde la raíz a Hamás, pero eso puede implicar reacciones islámicas radicales en toda la región y atentados en diversas partes del mundo. Por eso, desgraciadamente, la guerra sí puede escalar.
(*) Analista politico
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