Hace cuatro años partió el gran cantautor Juan de Dios Rojas

Integró “Los Pacharacos”, “Los Reyes de la Jarana” y “Los Hermanos Ascue”

Por: Lilly Bustamante

Con muchísimo pesar recordamos la partida del maestro cantautor Juan de Dios Rojas Ortiz. Un 20 de
enero de hace cuatro años apagó su voz y silenció las alegres notas musicales de su guitarra, fue un reconocido estudioso de la música costeña y andina y oficioso comunicador.

Su legado se traduce en sus composiciones como “Felicidad en tu día”, “El nuevo campesino”, “Verde
totora”, “Linda norteñita” y otras. Él fue limeño de nacimiento y sus inicios se remontan a la otrora radio “Mundial”, a decir de sus conocidos, cuando aún tenía escasos siete años.

Tan temprano comienzo en el arte y su claridad mental de niño le permitieron alternar con figuras de la
música criolla y andina. Ya adulto fundó el “Centro Musical Breña”, su popularidad iba en ascenso y formó parte de acreditados conjuntos. Es así como integra famosos conjuntos como “Los Pacharacos”,

Gracias a Pedrito Romero, otrora animador del “Salón del Folclor” y el “Supergordo”, que nos hace llegar esta gráfica de la desaparecida e inolvidable peña “El Hatuchay”, ubicada en el distrito de El Rímac. Fue una de las muy concurridas. La Noticia agradece que sigan enviando fotos de las desaparecidas peñas en Lima.

Pasaría después a integrar el “Dúo Huancayo”, junto al desaparecido Huanca Herrera. Juan de Dios supo asimismo activarse en el periodismo, otra de sus pasiones, laborando en los diarios “El Popular” y “La “República”, y en conocidas emisoras de la capital.

Se le recuerda igualmente por su performance con Edwin Montoya, reconocido artista ayacuchano; así como con Rafael Amaranto integrando el conjunto “Los Tres del Perú”.

Era infaltable en los recitales de Martina Portocarrero y Nelly Munguía, grandes figuras también ya fallecidas.

La partida de Juan de Dios enlutó a la música peruana, sus restos fueron velados en el auditorio del Museo de la Nación. En la Asociación Nacional de Periodistas (ANP) lo recuerdan como entusiasta socio que animaba tertulias periodísticas en su local del Jr. Huancavelica.

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