El fútbol peruano se aleja cada vez más de ser fútbol peruano. Ya hemos comentado que nos parece una exageración permitir seis extranjeros en cancha más nacionalizados, con lo cual un equipo podría tener en el once titular a todos los jugadores nacidos fuera de nuestro país.
Pocos clubes trabajan seriamente sus divisiones menores aunque luego no les dan oportunidad en el primer equipo a los jugadores que forman. De seguir así no surgirán jugadores y no habrá futbolistas para la selección. A la gran cantidad de jugadores extranjeros se suman los entrenadores foráneos, dieciséis de los dieciocho equipos que participarán en la Liga 1 el 2025 cuentan con entrenador extranjero.
De los técnicos extranjeros trece son argentinos, dos colombianos y uno uruguayo. Sólo cuentan con entrenadores peruanos los dos nuevos integrantes de la máxima división. Santiago Acasiete dirige a Juan Pablo II College de Chongoyape y Paul Cominges es el director técnico de Alianza Universidad de Huánuco.
Espero que les den el tiempo necesario para armar sus equipos y no sea como a otros entrenadores de equipos ascendidos que son reemplazados en las primeras fechas. En el 2024, dos técnicos peruanos se retiraron como son Franco Navarro y Julio César Uribe que han asumido labores administrativas en Alianza Lima y Sporting Cristal, respectivamente.
Por otro lado, los hermanos Wilmar y Marco Valencia estarán a cargo de las divisiones menores de Alianza y Melgar. Carlos Silvestri trabajará divisiones menores en la FPF al igual que José del Solar. De esta forma seis buenos entrenadores nacionales se alejan de la Liga 1.
Roberto Mosquera, Juan Pajuelo y Roberto Arrelucea, por citar solo a tres, deberían estar dirigiendo en primera, lamentablemente los dirigentes desconfían del talento nacional y no solo ellos lo hacen, también lo ha hecho Franco Navarro que viajó a Argentina a buscar al nuevo entrenador de Alianza.
Ante la inminente salida de Jorge Fossati de la selección peruana de fútbol se escuchan voces pidiendo que la selección sea dirigida por un entrenador peruano y que para los seis partidos que faltan de las clasificatorias sudamericanas se emplee jugadores jóvenes del campeonato local, idea que compartiría si es que los clubes dieran cabida al talento nacional y no tuvieran tanto extranjero, en la mayoría de los casos desconocidos o veteranos.
El problema de nuestro fútbol es de gestión, salvo honrosas excepciones, los dirigentes no están dando la talla y ya que les gusta tanto traer jugadores y entrenadores extranjeros me pregunto si no sería mejor reemplazarlos por dirigentes extranjeros que puedan enderezar la nave que va camino al naufragio. Les deseo un próspero y bendecido 2025 en el que espero nuestro país tenga muchas bendiciones y disfrutemos de noticias positivas.
(*) Periodista deportivo.
