El país entero ha sido testigo de una agresión verbal que no tiene parangón en la política peruana. Lo que ha hecho el premier Guido Bellido con la congresista Patricia Chirinos es una grave ofensa a la mujer, al margen de su calidad de parlamentaria. Él es un hombre y ella es una mujer y a la mujer se le debe respeto, no se le debe ofender en la forma como lo ha hecho el titular de la PCM.
Es una injuria porque uno no le puede decir a una mujer “solo falta que te violen”, eso va contra su reputación y su honor. Aun si tuviera confianza con la otra persona -como trató de defenderse luego el señor Bellido- él ha cometido una falta grave con esa persona.
Desgraciadamente, esto ocurre porque han puesto ministros que no tienen la categoría ni la calidad para esos cargos, sobre todo cuando la primera actividad que realizó fue darle reconocimiento oficial a un grupo de personas vinculadas al Movadef, eso preocupa. Ojalá el Congreso haga algo porque, recordemos, la Dircote fue intervenida hace un mes por inspectoría de manera inusual porque fueron seis equipos cuando normalmente va solo uno y esa intervención se dio pocos días después de que se informara de que Perú Libre estaba siendo investigado por actos ligados al terrorismo. ¿Qué documentos incautaron? ¿Qué encontraron? He ahí que llama poderosamente la atención que pese al tiempo transcurrido ni el Congreso ni la fiscalía hayan hecho algo para investigar a qué fueron, sobre todo cuando hay una investigación tan delicada de por medio Qué casualidad que fueron a intervenir justamente a una institución de la policía relacionada con el terrorismo. Es lamentable la pasividad que viene mostrando este Congreso, esto no puede admitirse bajo ningún punto de vista.
Y todo esto está vinculado al traslado de Vladimiro Montesinos y otros reos a cárceles comunes; es un claro ejemplo de que la Marina ya no quiere tener este tipo de responsabilidades a su cargo y le tira la pelota al INPE. Al final, se ha tomado esa sorpresiva decisión de trasladar a cárceles comunes a terroristas conocidos como Abimael Guzmán, Osman Morote y otros tantos.
Para mí lo que viene haciendo el presidente y sus ministros es puro populismo: están ofreciendo dar dinero y yo me pregunto de dónde van a sacar esa plata. A la final van a dejarnos sin fondos como ocurrió, por ejemplo, en la época de Vizcarra y Sagasti, quienes dilapidaron todas nuestras reservas bajo el pretexto de las compras de pruebas rápidas, camas UCI, vacunas, etc. Lo que el pueblo necesita es trabajo. Enséñale a la gente a pescar, no le regales pescado porque esta situación de regalar plata no va resolver mucho. En un momento no tendremos de dónde regalar plata y llegaremos al caos y a la pobreza como se vive actualmente en Venezuela o Nicaragua.
(*) Exdecano del Colegio de Abogados de Lima
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