La inseguridad ciudadana y la crisis económica siguen siendo los principales problemas del país. Uno se queda admirado al ver cómo, según consta en encuestas, estadísticas y reportajes periodísticos de Japón, la mayoría de las billeteras y celulares olvidados por sus dueños en el tren u otros servicios de transporte público de Tokio son entregados a las autoridades por quienes los encuentran. Da envidia sana. En Lima ocurre todo lo contrario, pero, aun con la inestabilidad política, que pone piedras en el camino, algo se puede hacer.
Aun cuando sería lo adecuado que la seguridad ciudadana responda a un plan general articulado por el Gobierno, a través del Ministerio del Interior y otros estamentos, vinculados no solo a la acción operativa de la policía, sino también a la educación y el deporte, a nivel local también puedes desarrollarse estrategias focalizadas de éxito. Esa función es competencia de los alcaldes y sus áreas de seguridad ciudadana, a cargo, en muchos casos, de expolicías y exmilitares o personas especializadas y con experiencia en el ramo.
Eso lo podemos advertir al darle una lectura al último reporte de la Misión Internacional de Ciudades Seguras (MIC) de los resultados de un estudio estadístico centrado en la percepción de seguridad ciudadana en 30 distritos de Lima Metropolitana. La encuesta, realizada en abril de 2024, detalla los niveles de temor que experimentan los vecinos al transitar por las calles de su distrito.
Según dicho informe, los distritos de Lima más inseguros son: San Martín de Porres (95.5 %), San Juan de Lurigancho (94 %), San Juan de Miraflores (92.8 %), Comas (92.3 %), Independencia (92.1 %), Carabayllo (91 %), Villa El Salvador (90.4 %), Villa María del Triunfo (90.2 %), Rímac (89.7 %) y Ate (88 %). A excepción del Rímac, todos estos distritos están ubicados en los denominados conos.
Los cuatro distritos donde los vecinos tienen más miedo, San Martín de Porres, San Juan de Lurigancho, San Juan de Miraflores y Comas, son precisamente los que albergan a la mayor cantidad de migrantes venezolanos, un dato que debe servir para el análisis y el replanteamiento de las estrategias contra la inseguridad ciudadana.
De otro lado, los distritos con mayor percepción de seguridad son: Magdalena (45 %), San Isidro (47 %), San Borja (56%), Miraflores (57 %), Jesús María (59 %), Barranco (61 %), Surco (62.5 %), Pueblo Libre (68.4 %), San Miguel (69.5 %) y Surquillo (66.7 %). Aquí también se observan algunos cambios respecto a los anteriores estudios de este tipo, pues han variado las posiciones. Mañana continuamos con este análisis. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.
