Bombardeos de milicias separatistas prorrusas causan pánico en Ucrania
Primer ministro británico Boris Johnson acusa a Moscú de intentar desacreditar a Kiev
Una serie de bombardeos se registraron en las últimas horas en Ucrania, afectando varias zonas, entre ellas un preescolar donde se encontraban niños. Las milicias separatistas prorrusas de las regiones de Donetsk y Lugansk y el Gobierno ucraniano se han acusado de los ataques.
Según el ejército ucraniano, 32 proyectiles cayeron sobre la ciudad de Kiev y uno de ellos impactó en una guardería, donde tres empleados resultaron heridos. Otro proyectil cayó sobre un parque infantil, donde se pudo observar un cráter en forma de embudo entre dos toboganes.
Las tiendas de la ciudad permanecieron cerradas tras los bombardeos, por falta de electricidad. Algunos habitantes cubrieron sus ventanas con bolsas de plástico, ya que muchas fueron reventadas por las explosiones.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenksi, denunció que los bombardeos eran una “provocación” y el primer ministro británico, Boris Johnson, acusó a Moscú de querer “desacreditar” a Kiev para justificar una invasión. Los separatistas de Luhansk, por su parte, acusaron al gobierno de haber aumentado el número de bombardeos con armas pesadas para “empujar el conflicto hacia una escalada”.
Tras los primeros ataques, los líderes de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk, Denís Pushilin y Leonid Pásechnik, instaron a los residentes de Donbass a evacuarse a Rusia y denunciaron que el presidente Zelenski pronto ordenaría a sus fuerzas militares lanzar una ofensiva sobre la ciudad.