Arde edificio en el centro de Lima por violentas marchas de protesta
Gigantesca construcción de los años 30 ardió en llamas y quedó como cascarón
Una dantesca imagen fue el corolario de una de las jornadas más violentas que se hayan registrado en Lima, la otrora Ciudad Jardín. En medio de las marchas de protesta, un voraz incendio se desató en un edificio en el Centro Histórico, a pocas cuadras de la Plaza San Martín.
Alrededor de las 8 de la noche, cuando grupos de vándalos avanzaban por las avenidas Abancay, Nicolás de Piérola y Emancipación, a través de las ventanas de una antigua construcción empezaron a observarse lenguas de fuego que rápidamente fueron creciendo.
LENGUAS DE FUEGO
El edificio está ubicado en el cruce del jirón Contumazá con el jirón Lino Cornejo, curiosamente, muy cerca del Parque de la Democracia, donde hasta el año 2000 funcionaba la agencia del Banco de la Nación que fue incendiada en la primera “Marcha de los 4 Suyos”, durante el gobierno de Alberto Fujimori.
A los pocos minutos empezaron a llegar las primeras unidades de la Compañía de Bomberos, pero su paso fue obstruido por los manifestantes, que temerariamente y con ademanes violetos se colocaban en medio de la pista. Luis Antonio Ponce La Jara, comandante general del Cuerpo de Bomberos del Perú, a través de la prensa, invocó a los manifestantes a dejar pasar a los carros con los “hombres de rojo” para que puedan “salvar vidas”.
CÓDIGO 3
El Centro de Operaciones de Emergencia Nacional del Instituto Nacional de Defensa Civil informó que se trataba de un incendio de código 3, es decir, estaba fuera de control.
El edificio, que fue construido en los años 30 y albergaba a delegaciones de artistas, es de quincha y por eso no pudo resistir al influjo de las llamas. El techo se vino abajo y las chispas cruzaron la calle y llegaron a otra construcción, donde se produjo otro incendio de menor magnitud y que fue sofocado rápidamente.
Mario Casaretto, comandante general de los Bomberos, dijo que el edificio, que quedó como cascarón, ya estaba perdido y lo que quedaba era evitar que las llamas se sigan propagando a otras construcciones.
Hasta altas horas de la noche seguían trabajando 27 unidades, entre autobombas, vehículos de rescate y unidades aéreas, para sofocar el incendio.
