- Hernando Tavera indicó que a partir del año 1975 la migración empieza a llegar a Lima Metropolitana y ocupan suelos que no eran los adecuados, con rellenos, arena, en las riberas de los ríos, quebradas y faldas de los cerros, lo cual es un riesgo.
POR: CARLOS RIVERO MELGAR
Con un 70 % de construcciones vulnerables a sismos y un auge de la ocupación en las laderas de los cerros, Lima no está preparada para un terremoto de gran magnitud, advirtió Hernando Tavera, presidente del Instituto Geofísico del Perú (IGP), en entrevista con nuestro canal digital La Noticia Perú.
Este 3 de octubre se cumplen 50 años del sismo de 7.7 grados que golpeó Lima, y dejó 250 fallecidos, más de 3,000 heridos y cuantiosas pérdidas. ¿Estamos preparados para enfrentar un sismo de igual o mayor magnitud?
Hay que tener muy en cuenta dos cosas: vivimos en un país altamente sísmico; y segundo: los sismos son cíclicos. En ese escenario, si por algún momento pensamos que el sismo de 1974 se va a repetir, la pregunta sería: ¿qué ha cambiado? Si el sismo se repite con la misma magnitud y proceso de ruptura, el sacudimiento del suelo será idéntico, es decir, todas las características del sismo se repetirían al 100 %. Entonces, ¿qué es lo que ha cambiado realmente? La respuesta es sencilla: Lima ya no es la de los años 70. Las áreas urbanas han crecido y no de la manera adecuada, sino en base a invasiones, con viviendas autoconstruidas, entonces ¿estamos preparados para un nuevo sismo con las mismas características? Cualquier persona con un poco el criterio va a darse cuenta de que no lo estamos. No lo estamos porque realmente las ciudades, las áreas urbanas no se han desarrollado como debería haberse hecho.
En los últimos 15 o 20 años, Lima creció de modo vertical con grandes edificios.
El problema no es ese porque los edificios han crecido en los últimos 15 años con la norma de construcción sismo resistente. Esto en cierto modo nos da un poco de seguridad. El tema es qua partir del año 1975 la migración empieza a llegar a Lima Metropolitana ocupan suelos que no eran los adecuados. Estamos hablando de suelos con rellenos, arenas, empezamos a ocupar la ribera de las quebradas, de los ríos y hoy en día hay un auge por ocupar ladera de los cerros. Entonces, la preocupación está ahí. Los edificios que han sido construidos con la norma dan cierta confianza de que puedan responder de manera adecuada, pero el resto que es casi el 70 % de la infraestructura sí es preocupante.
Hay informalidad en un 70 % de las construcciones en los distritos que tienen cerros.
Claro, y se entiende que en su momento debió haber existido una gestión del uso del suelo, del crecimiento territorial por parte de las autoridades, pero todos sabemos que las ciudades como Lima o como cualquier otra del Perú siempre han crecido en base a las invasiones, y las invasiones en algún momento comienzan a exigir derechos, y ahí es donde se crea el gran problema.
Se habla mucho del silencio sísmico en la costa de Lima. Usted mencionaba que los sismos son cíclicos. ¿Cómo se define un gran sismo y de qué magnitud estaríamos hablando?
En principio, el concepto de silencio sísmico ya dejó de ser habitual entre nosotros en los años 90 porque el silencio sísmico hacía referencia a un mapa donde ubicábamos el lugar donde ocurrieron los últimos grandes sismos e identificamos aquellas áreas donde no habían ocurrido en los últimos 100 o 200 años. Hoy en día hablamos de las zonas acopladas, es decir, que hoy en día sabemos dónde las placas están más adheridas, más pegadas, si queremos usar palabras más sencillas, y dónde no lo están. Donde no lo están no habrá sismo y donde están muy pegadas, muy adheridas, habrá sismos y eso es lo que se ha identificado hoy en todo el mundo.
¿Qué evidencias sugieren que la costa central de Perú podría experimentar un sismo similar al de 1746, con magnitudes superiores a 8.5?
En el caso del Perú se ha identificado frente a la costa central, donde está Lima, que todo indica que sería pues un sismo como el que ocurrió en el año 1746. Entonces estamos hablando de un sismo de magnitudes que sobrepasen el valor de 8.5, que es un sismo muy importante porque va a generar niveles de sacudimiento del suelo tan altos que probablemente la mayor cantidad de estructuras no van a soportar esos niveles de sacudimiento.
SISTEMA DE ALERTA SÍSMICA CERCA DE HACERSE REALIDAD
¿Cómo va la implementación del sistema de alerta sísmica en el país?
Es un proyecto muy bonito que empezamos en el año 2020 junto con INDECI. Nosotros, como IGP, hemos colocado 111 sensores a lo largo de la zona costera, hemos implementado los centros de control. Estamos a la espera de que INDECI termine de colocar las bocinas que deben estar distribuidas en las áreas urbanas para que el sistema empiece a hacer sus primeras pruebas. Esperamos que se aceleren un poco.
