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“Tenemos alrededor de 100 mil presos”

El ex jefe del INPE, Leonardo Caparrós, plantea ampliar en 6,000 las plazas penitenciarias y regular la prisión preventiva con el uso de grilletes

  • Leonardo Caparrón señala que algunos agentes penitenciarios reciben hasta 50 céntimos por dejar pasar un cigarrillo, mientras que otros reciben amenazas. Dice que deben pagarles un mejor sueldo porque no pueden vivir con 2,000 o 3,000 soles.

POR: CARLOS RIVERO MELGAR

El exjefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Leonardo Caparrós, señaló en nuestras cárceles hay alrededor de 100,000 presos, cuando su capacidad es para menos de la mitad de esa cifra. Por ello, en entrevista con nuestro canal digital La Noticia Perú, planteó ampliar en 5,000 o 6,000 la capacidad penitenciaria y, además, regular la prisión preventiva con el uso de grilletes.

¿Cuál es su análisis de nuestro sistema penitenciario?

Empecemos hablando del dinero. La inversión en el sistema penitenciario en los últimos 20 años ha sido pobrísima, desde salarios, recursos logísticos, hasta inversión en penales nuevos. El único penal importante que se ha construido es Piedras Gordas, hace unos 15 años.

¿Cuántos nuevos penales se necesitan para resolver el problema del hacinamiento?

Tenemos unos 100,000 internos con una capacidad para 44,000 plazas. En este momento, tomando en cuenta la realidad económica y la ola criminal, se tiene que hacer un esfuerzo para al menos ampliar en unas 5,000 o 6,000 plazas, con unos dos o tres penales. Y la mitad de esas plazas deberían ser de alta seguridad. Con estas nuevas plazas lo que tendrías que absorber es a aquellos que necesitan una contención importante, como Piedras Gordas 1.

¿Qué otra medida se tendría que tomar?

Regular la prisión preventiva. No se puede abusar de la presión preventiva, y para eso hay que activar el tema de los grilletes electrónicos, que es una herramienta que funciona muy bien para contener a personas que no tienen ningún incentivo más para fugarse, porque sus penas son bajas y puede terminar cumpliendo sus condenas encerradas en su casa. Con un seguimiento adecuado, eso, el grillete, puede funcionar perfectamente. Para que el grillete funcione solo falta voluntad y liderazgo, porque la tecnología existe, está disponible, no es tan cara en comparación con los costos que significan mantener a un interno en un penal.

Existe una propuesta para llevar a prisión a los menores de 16 y 17 años que cometan delitos graves. ¿La aplicación de esta norma agravará la situación?

Cada vez son más las organizaciones criminales que buscan a chicos más jóvenes para que se encarguen del trabajo sucio, porque saben que están exentos de la ley penal. Estos chicos son herramientas que están siendo usadas como armas. Hay que ver quiénes son los que incitan a los menores para que cometan esos delitos. Esas personas deberían irse a cadena perpetua, aunque no hayan disparado el arma. El segundo tema es que las comparaciones que hacen son erradas, porque dicen que en otros países se aplican para menores de 12 o 13 años. Hay tres situaciones a tomar en cuenta: primero, sin responsabilidad penal; segundo, con responsabilidad penal juvenil, y tercero, con responsabilidad penal adulta.

Existe una iniciativa para enviar a los presos de alta peligrosidad a cárceles de El Salvador

Están buscando el camino más corto. No hacemos nada en 20 años y ahora quieren mandarlos a El Salvador. Me parece un mensaje negativo para la criminalidad, porque a los criminales les estamos diciendo que somos unos inútiles, y no tenemos la capacidad de contenerlos cuando sean detenidos. Nuestra constitución habla que el recluso tiene derecho a estar en un establecimiento penitenciario adecuado ¿El SECOT es una prisión adecuada? Es una prisión con 40 internos por celda, donde hay tratos humillantes. Independientemente si se lo merecen o no, esta propuesta no se adecua a nuestra legislación, porque tendríamos que modificar la Constitución para que los presos puedan estar en establecimientos penales inadecuados que permitan humillar al interno. Por otro lado, el Código de Justicia Penal sí permite el traslado de un interno a una cárcel en el extranjero, pero es para cumplir sentencia en otro país, pero es un trámite bastante engorroso. Lo que más me preocupa es que existen leyes y tratados, y en 5 años esos señores van a regresar con indemnizaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Eso ocurre porque tomamos soluciones facilistas en lugar de invertir y hacer un cambio en nuestro sistema.

¿Un agente penitenciario está expuesto a actos de corrupción?

Totalmente, pero eso no disculpa los actos de corrupción que existen. Hay algunos que te reciben 50 céntimos por dejar pasar un cigarro. Es un tema de amor propio, de alguien que es una autoridad y está dispuesto a recibir de sol en sol para dejar pasar alguna cosa. Se tiene que trabajar con los nuevos, y con los que ya existen, pero tienes que pagarles más. Un trabajador penitenciario que además recibe amenazas, sus familias reciben amenazas no puede vivir con 2,000 o 3,000 soles.

LA VIOLENCIA DE LA CRIMINALIDAD ES MAYOR QUE ANTES

¿Qué tan en serio deben tomarse las amenazas de las organizaciones criminales contra algunos establecimientos penales?

El nivel de violencia en la calle ha subido enormemente y eso obviamente tiene un reflejo inmediato en el penal. Estas amenazas contra los penales hay que tomarlas más en serio que hace 10 años, porque la violencia con que se está desarrollando la criminalidad es mucho mayor.

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