El caso del crimen de la extrabajadora del Congreso, Andrea Vidal, perpetrado el año pasado cuando se dirigía a su vivienda a bordo de un taxi, por La Victoria, es blanco de una investigación.
Según las pesquisas de la Fiscalía y la Policía avanzan con las precisiones del protocolo de necropsia practicado tanto a la joven como al taxista venezolano identificado como José Daniel Vargas Briceño. El informe indica que en el lugar del crimen se halló 62 casquillos de bala, lo que evidencia la brutalidad del ataque.
En total, Vidal recibió siete impactos que se alojaron en la cabeza, el tórax y las extremidades inferiores. En tanto, el conductor recibió 16 tiros: dos en la cabeza, cuatro en el cuello, cinco en el tórax, uno en el abdomen, dos en la pelvis y dos en las extremidades superiores.
Los peritos indicaron que los disparos fueron efectuados por sicarios desde vehículos en movimiento y que durante la operación debieron ubicarse en paralelo al taxi para “lograr el aseguramiento, que es lo que persigue el sicario”.
