¿Por qué no allanan casas de fiscales Vela y Pérez?

Luis Gonzales Posada indicó que el ministro Juan Santiváñez tiene enemigos en la Fiscalía porque es “anticaviar”. Agregó que el sector caviar, que tiene influencia en el Ministerio Público, es duro e implacable con quienes no estén en su línea política.

Por: Carlos Rivero Melgar

El excanciller y excongresista Luis Gonzales Posada, en entrevista con nuestro canal digital La Noticia Perú, señaló que, al allanar la casa del ministro del Interior, Juan José Santiváñez, la Fiscalía de la Nación ha creado una crisis política. Cuestionó que el Ministerio Público no actúe de la misma manera con el periodista Gustavo Gorriti y los fiscales Rafal Vela Barba, José Domingo Pérez y Pablo Sánchez.

¿Qué opinión tiene sobre el allanamiento de la casa del ministro del Interior, Juan José Santiváñez?

Yo hubiera querido ver la misma firmeza del Ministerio Público, por ejemplo, con el IDL de Gustavo Gorriti, con los fiscales Vela Barba, José Domingo Pérez, Pablo Sánchez, que comprobadamente son parte de un sistema paralelo que maneja el poder en la Fiscalía. No se ha podido siquiera deslacrar un teléfono del señor Gorriti. Parece imposible. Sin embargo, sí lo puede hacer la fiscal de la Nación con el ministro del Interior, creando una crisis política. Esperemos que esto se solucione porque también la Fiscalía derecho de hacer lo que le venga en gana. No es un gatillo suelto que puede disparar balas a cualquier ciudadano, sea ministro o no lo sea.

¿Sería esto parte de una estrategia para seguir deslegitimando al gobierno?

Bueno, lo supongo porque todos saben que el ministro (Santiváñez) es un reconocido anticaviar, por decirlo en una forma clara. Entonces, si es anticaviar, obviamente es enemigo de todo ese sector, que es duro e implacable con quienes no estén en su línea política. Recordemos, nomás, que por esa razón la señora Keiko Fujimori pasó 486 días en la cárcel, fue exhibida con marrocas y con casaca de detenida, sin ninguna justificación. Y que el presidente Alan García fue maltratado, acosado y tratado de capturar, provocando con ello su suicidio. Nada de estas cosas, evidentemente, le preocupan a la Fiscalía, no ha hecho ninguna investigación.

¿Qué se debe hacer para mejorar la gestión del Ministerio Público?

Hay que despolitizar la Fiscalía, porque es la defensora de la legalidad. Ahora tiene un enorme desprestigio de acuerdo a todas las encuestas de opinión pública, y ha cometido gruesos atropellos que afectan a un estado constitucional de derecho, todavía débil y precario. Ninguna institución puede emplear recursos públicos con ese propósito. Hacerlo es un acto truculento, de barbarie, incompatible con la democracia. De otro lado, el régimen de Nicolás Maduro aún mantiene retenidos a más de 100 extranjeros, entre ellos cuatro peruanos. Primero, debemos saludar la firme posición del canciller Elmer Schialler de protestar ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas por el secuestro de cuatro connacionales y lo mismo debemos hacer en todos los foros mundiales. No sabemos si están vivos, muertos o en alguna cárcel. Nuestra Cancillería ha hecho llegar varias comunicaciones al gobierno venezolano, a través de la Embajada de Brasil, que nos representa, pidiendo conocer el paradero de nuestros compatriotas, pero no tenemos ninguna respuesta. Entonces, me parece bien que el caso se lleve al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y a todos los foros internacional porque no podemos aceptar que el secuestro se constituya en una política permisible de un Estado porque se trata de un acto criminal. El secuestro es un crimen de lesa humanidad, abominable y cobarde, porque trafica con la vida de seres humanos a cambio de ventajas políticas o económicas.

Hace poco vimos que el gobierno de Maduro entregó a EE. UU. a seis norteamericanos secuestrados.

Trump envió a un embajador especial a Caracas para entrevistarse con Maduro, al señor Richard Grenell, para que deje en libertad a seis norteamericanos que se encontraban detenidos o secuestrados en ese país. Fue una gestión humillante, pero finalmente Granell lo consiguió porque Maduro les entregó a sus presas. Así como ellos, hay 120 extranjeros de 15 nacionalidades secuestrados y por supuesto no escuchamos la condena del mandatario estadounidense. Ahí perdió su aparente bravura.

De otro lado, ¿qué le pareció la reunión entre Donad Trump y el presidente ucraniano Volodímir Zelenski?

El señor Zelenski viajó 7,828 millas, que es la distancia que separa Kiev de Washington, para entrevistarse con Trump. Llegó a la Casa Blanca y desde un principio se notó la animadversión hacia él por parte de Trump y de las dos personas que los acompañaban, el vicepresidente James Vance, y el señor Marcos Rubio, secretario de política exterior. Primero, preguntaron por qué había ido con chompa, que es la ropa que usa en todos los eventos para graficar que su país está en guerra Zelenski fue a Washington a decir a Trump su preocupación por lo que ocurría en su país invadido por Rusia, donde se registran miles de muertos y la destrucción material de la infraestructura estimada, según el reporte de las Naciones Unidas/ Comunidad Europea, en cerca de US$ 500,000 millones. O sea, para expresar que Ucrania es un país golpeado humana y económicamente por Rusia. Lo que ha recibido de Trump, lo hemos visto todos, son burlas, maltratos y una actitud matonesca y deplorable.

Vio una emboscada de Donald Trump a Vladímir Zelenski

A juicio de Luis Gonzales Posada, la reunión entre los presidentes de Estados Unidos y Ucrania debió ser en privado y no para las cámaras de televisión y con terceras personas como invitadas. “Cuando termina la reunión, recién entra la prensa para que el acto sea refrendado públicamente. Aquí no fue así. Fue una trampa, una emboscada o como se quiera llamar, y ocurrió en circunstancias dramáticas porque la invasión continúa”, acotó.