Los pobladores de San Juan de Lurigancho aún no cuentan con el servicio de agua potable tras la falla en una prueba del Sistema Alterno de Emergencia del Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (Sedapal).
Una semana después de producirse el problema, los vecinos de la zona están desesperados y forman largas colas para obtener un balde del agua que reparten las cisternas de Sedapal, pues el líquido elemento no alcanza para todos.
BALDES Y TINAS
Con baldes, tinas, botellas y cilindros, esperan en las colas para poder abastecerse. Algunos recurren a las cisternas particulares de personas inescrupulosas que aprovechan la situación para vender agua y hacer negocio.
La falta de agua ha empeorado la situación de las ollas comunes. Por ejemplo, las madres de “Mujeres Luchadoras”, de la agrupación familiar Nueva Juventud, en la parte alta del distrito, tienen que hacer colecta de agua entre los vecinos para poder cocinar.
