“La izquierda busca tumbarse al Gobierno”
Analista José Luis Gil sostiene que radicales y caviares no le perdonan a la presidenta Dina Boluarte que no haya seguido el camino de Pedro Castillo

- José Luis Gil, exmiembro del GEIN, señala que a la izquierda le conviene un país en crisis y por eso crea inestabilidad política con la finalidad de provocar la caída del Gobierno. Su objetivo, según dijo, es tomar el Congreso y tener un Poder Ejecutivo a su medida.
POR: CARLOS RIVERO MELGAR
El exdirector de Inteligencia del Ministerio del Interior, José Luis Gil, en conversación con nuestro canal digital La Noticia Perú, señaló que, tras la caída de Pedro Castillo, la izquierda ha optado por un repliegue estratégico para tomar un impulso y ahora apunta a tomar el control del Congreso a fin de hacer reformas en la Constitución y los cambios políticos que necesitan.
¿Cómo analiza el panorama electoral si tomamos en cuenta que solo hay dos facciones, derecha e izquierda?
Los de la izquierda son los zombis de Marx, de Lenin, de Mao. Después de la caída de Pedro Castillo han entrado en un repliegue estratégico, así como lo hicieron cuando cayó Abimael Guzmán. Han replegado sus recursos para reiniciar sus acciones y empezar a emerger este 2025, un año preelectoral.
Cuál cree usted que va a tener mayor presencia en estas elecciones, ¿la izquierda radical o la izquierda caviar?
Todas las izquierdas, la radical, la no radical, los que no tienen experiencia armada y la izquierda progre (caviares), pese a sus diferencias ideológicas y políticas, son funcionales entre sí, porque tienen un solo objetivo: el Congreso. Si ganan en el Congreso, independientemente de que el presidente sea de derecha o izquierda, van a poder generar una nueva Constitución y los cambios políticos que necesitan. Si Antauro (Humala) o Verónika Mendoza postulan a la presidencia, eso es irrelevante, porque están alistándose para tomar el Congreso. Y para eso se van a meter a los partidos políticos, infiltrarse en los pequeños grupos, meterse a los movimientos regionales para ganar congresistas.
¿Cuál ha sido el impacto que ha causado en la izquierda la caída de Pedro Castillo y la asunción de Dina Boluarte?
La izquierda tiene totalmente claro que mientras dure el gobierno de Dina Boluarte, el socialismo es inviable. Castillo es el que más se ha acercado al socialismo después de Velasco, con un gabinete en la sombra ideológico dirigido por Sendero Luminoso. Estaba creando las condiciones sociales, políticas y económicas para hacerlo. La estrategia estaba dirigida por estos expertos en socialismo, que son la gente de Sendero y del MRTA, disfrazados de políticos. Por falta de formación ideológica, la presidenta Boluarte no ha seguido este camino, que la izquierda esperaba ella continúe. Sin ser una mujer de derecha, con su política ha permitido que se mantenga el rumbo económico. El problema del país es político, la corrupción y la baja calidad del Congreso, de la mayoría del Congreso, crean una sensación de inestabilidad política que los carroñeros de la izquierda necesitan para tumbarse al gobierno. No le perdonan no solo que no haya seguido el camino de Castillo, sino que no haga nada para dejarle las condiciones para el próximo gobierno. Por eso el interés en atacarla, para acabar con su gobierno lo más pronto posible, y poner otra persona, hay que crear inestabilidad política, porque es de lo que viven; necesitan tener un país en crisis para poder tener un gobierno a la medida.
¿Qué deben estar haciendo los partidos políticos para enfrentar una campaña con más de 50 partidos en carrera?
La izquierda tiene una estrategia. Saben que su objetivo es el Congreso, sus candidatos presidenciales van a ser irrelevantes. A Antauro Humala lo utilizarán para jalar gente para el Congreso. La derecha, en cambio, está esperando las elecciones para presentar a su candidato, pero eso es un error. Deberían estar organizándose, haciendo grandes alianzas, grandes bloques democráticos, resolviendo a los mejores de sus canteras, los mejores candidatos que para el Congreso, y un presidente que tenga la mayoría. Más que un discurso radical, lo que necesitamos es alguien que nos proyecte seguridad, entereza, honestidad, decencia. Entonces, la gente tendrá que elegir entre alguien decente y un asesino y terrorista.
¿Cree que el mensaje sobre la inseguridad va a ser clave en la campaña?
Los candidatos deben entender que esto no se resuelve con operativos policiales. Enfrentamos una cultura criminal en Sudamérica que tiene subsistemas criminales, y esto se enfrenta con una cultura por la seguridad. La criminalidad está en plena evolución. Recién ha comenzado en Sudamérica, y tenemos para largo rato. Si un candidato no nos da garantías de que va a tener una estrategia integral en todos los ámbitos de la organización social, en la que el desarrollo de la inteligencia policial no se base en operativos ni en operaciones, y que además se trabaje en conjunto con los demás países que sufren de esta marea negra que es la criminalidad, creo que no va a tener éxito.
“NO ES UN TEMA DE POLICÍAS Y LADRONES, DE MARROCAS Y PATRULLEROS”
¿Usted cree posible que ocurra atentados contra algún candidato en las próximas elecciones?
Totalmente. En México, solamente el año pasado, más de 50, entre candidatos, autoridades, alcaldes y regidores han sido asesinados. Están ocurriendo asesinados en Ecuador y Colombia, donde también están matando a dirigentes populares. En el Perú tenemos más de 50 dirigentes o APUS de las comunidades indígenas que han sido asesinados. ¿Qué estamos haciendo? ¿Creen que la criminalidad no se va a meter con los políticos? Estamos subestimando a la criminalidad, porque seguimos pensando que es un tema de policías y ladrones, de marrocas y de patrulleros, y no es así.