“La Fiscalía debe eliminar los equipos especiales”
Abogado penalista Christian Salas dice que estos grupos no han tenido resultados y solo han servido para empoderar a fiscales como José Domingo Pérez y Marita Barreto

- El jurista dice que urge eliminar los llamados equipos especiales como Cuellos Blancos, que no da mayor resultado; el equipo Lava Jato, con un protagonismo en la política evidente, con falencias, fallas y errores crasos en diversos procesamientos.
Por: Carlos Rivero Melgar
El abogado penalista Christian Salas, en entrevista con nuestro canal digital, La Noticia Perú, advirtió que es necesario realizar cambios urgentes en el Ministerio Público, pero no solo de nombres, sino también en su estructura, como la eliminación de los equipos espaciales Lava Jato y Cuellos Blancos que, a su juicio, no han tenido mayores resultados.
El exfiscal de la Nación, Pedro Chávarry, invocó a la fiscal de la Nación, Delia Espinoza, a realizar una serie de cambios en el Ministerio Público y le pedía que no se deje presionar. ¿Considera que hay cambios urgentes que se deben realizar?
Sin duda que sí, cambios no solo en relación a personas, es decir, nombramientos en ciertos puestos clave, como pueden ser presidentes, adjuntos, de fiscales coordinadores de estos equipos especiales, sino también en la propia estructura. Creo que hay un cambio urgente que surge de manera objetiva como una necesidad a partir de lo que hemos vivido como sociedad en los últimos años y los destapes que se han dado en el mal manejo que la Fiscalía ha tenido en las últimas gestiones de los fiscales de la Nación. Es urgente eliminar esos llamados equipos especiales como Cuellos Blancos, que no da mayor resultado, el equipo Lava Jato, con un protagonismo en la política evidente, con falencias, fallas y errores crasos en diversos procesamientos, como el caso Cócteles, este equipo Efficop, a cargo de la doctora (Marita) Barreto, que ha sido desarticulado. Estos equipos especiales no tienen razón de ser, porque ya en la estructura del Ministerio Público hay fiscalías especializadas. Los fiscales de la Nación, en el turno correspondiente, decidieron crear estos llamados equipos especiales que lo que generaron fue no solo ausencia de buen trabajo y falta resultados, sino el empoderamiento indebido de los nombres, llámese Domingo Pérez o Marita Barreto.
¿Entonces, el verdadero motivo para la creación de estos equipos fue quizás un manejo político?
La razón formal de la creación de estos equipos especiales no obedece a otra cosa que la coyuntura, es decir, los casos son tan escandalosos y mediáticos que la Fiscalía de la Nación en su momento dice, “a ver, si esto lo deriva a un fiscal especializado este se va a llenar de casos gigantes y, entonces, creo equipos especiales”, incluso se habilita presupuesto para estos. Pero, en la práctica, esto ha servido para generar una especie de nichos desde donde el fiscal a cargo no solo se empodera, sino que da la apariencia de que la Fiscalía sí está investigando, pero en la realidad hemos visto que eso no es así; los fiscales se han equivocado, han trabajado mal la colaboración eficaz, han celebrado acuerdos de colaboración totalmente lesivos para el Estado, han filtrado información indebidamente, han jugado con la información del caso, politizándolo y generando presión para lograr algunos objetivos.
El juez Richard Concepción Carhuancho está nuevamente en el ojo de la tormenta por un adelanto opinión en el caso “Los Waykis en la Sombra”. ¿Cómo ha quedado el magistrado con esto?
Lamentablemente, su situación se mantiene tal cual, y digo lamentablemente porque el hecho de que un juez que está en pleno desarrollo de una audiencia de prisión preventiva contra determinado ciudadanos y todavía está pendiente su decisión, en ese interín lo que hace es dictar una clase y a esos ciudadanos que está procesando los exhibe en una diapositiva en una imagen su foto como presuntos corruptos, ese solo hecho constituye un adelanto de opinión, es una afectación a algo crucial de un juez, el principio de imparcialidad, que es un derecho que todos tenemos. Esta situación, que es una falta disciplinaria administrativa funcional del magistrado, se agrava si es que fuera verdad lo que los medios de comunicación han dicho; es que el magistrado llama por teléfono al coordinador de esa clase que él dictó y le dice “oiga, doctor, suprímame esa diapositiva, ha sido un error”, es una falta; la otra falta es que lo llame y le diga “oiga, doctor, la prensa está indagando sobre esto, usted guarda silencio, no diga la verdad”, eso no es propio de un magistrado. Esto tendría que haber generado hace ya varios días un comunicado de los órganos de control o de la JNJ diciendo, “señores iniciamos un procedimiento disciplinario contra el magistrado”, cosa que hasta ahora no ocurre, pero en otros casos sí, de inmediato aparecen los comunicados, los tuits indicado que se abre investigación, aquí hay un trato diferenciado.
¿Y por qué este trato diferenciado con Carhuancho?
Lamentablemente, no solo es en relación a este magistrado, en el sistema de justicia nacional a nivel de jueces de investigación preparatoria se designó o se nombró a diversos magistrados que, con el tiempo, hemos visto, han servido para los fines de estos llamados equipos especiales. Si analizamos las decisiones de estos jueces de investigación preparatoria, vamos a ver que muchos, de manera irreflexiva, sin mayor análisis, han servido como una suerte de mesa de partes para que el requerimiento fiscal de una detención preliminar, allanamientos, prisiones preventivas, se aprueben de inmediato. Y esto no es porque lo diga yo como abogado, esas decisiones han sido corregidas cuando han sido apeladas, es decir, la Sala Superior, han dicho que los investigados sí tienen razón, aquí hay crasos errores. Esto nos lleva a inferir que estos jueces lamentablemente se han prestado para aquellos pedidos abusivos desproporcionales que la Fiscalía en su momento pidió y usó políticamente contra toda la clase política y sirvieron en su momento para eliminar magistrados adversos a cierto sector político.
“Las ONG capacitan a jueces y fiscales con sus ideologías”
Para el abogado Christian Salas, la influencia de ONG en el sistema de justicia se inició con la llegada al poder del expresidente Alejandro Toledo. “Es ahí donde se genera ese nicho, ese espacio para hacer una remoción de magistrados, cambios en el Ministerio Público e ingresar a nuevos entes o actores políticos gravitacionales determinantes en la política peruana entre ellos las ONG, recordemos el rol importante de Gustavo Gorriti. Las ONG, entre comillas de derechos humanos, intervienen hasta el punto que se vuelven capacitadores de jueces y fiscales con sus ideologías y ese resultado de décadas lo estamos viviendo hoy”, dijo.