El gobierno de Donald Trump impuso una nueva regla que busca imponer multas significativas a los inmigrantes que intencionalmente incumplan órdenes de deportación en Estados Unidos.
La nueva norma federal, anunciada conjuntamente por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y el Departamento de Justicia (DOJ), establecería una multa de hasta 998 dólares por día para los extranjeros que no acaten una orden de deportación de manera intencional.
La propuesta también contempla sanciones económicas para otras infracciones migratorias. Los inmigrantes que no cumplan con una orden de salida voluntaria podrían enfrentar cobros que oscilan entre 1,992 y 9,.970 dólares. Adicionalmente, los extranjeros que intenten ingresar o ingresen ilegalmente al país podrían ser multados con montos de entre 100 y 500 dólares.
