Folklore

Dúo Las Golondrinas brilló con luz propia durante décadas

Por: Lilly Bustamante

El dúo Las Golondrinas resplandeció hace décadas con luz propia en los primeros coliseos que aparecieron en Lima.

Sus melodiosas voces eran fervientemente aplaudidas por sus admiradores al escuchar “Vil cocodrilo”, “Santo Domingo de Sicaya”, “Lágrimas de amor”, “Noche de Luna”, “Cuatro de Agosto” y “Mala, malita mala”, ahora inolvidables clásicos. Eran los años 1950 y 1960.

Las virtuosas Las Golondrinas, conformadas por las hermanas Martha e Isabel Espinoza Aybar, entonaban con clase los huainos y mulizas. El cronista Guillermo Joo Muñoz, uno de los pocos versados en temas de nuestro acervo musical andino, reafirmó que, en efecto, el dúo brillaba con luz propia y causaba delirio entre los asistentes a El Bolívar, Lima, Inca, Tropicana, Nacional, Mundial y Cerrado, coliseos de entonces. En el acontecer de su carrera artística, Las Golondrinas dejaron de cantar por un buen tiempo.

Retornaron a los escenarios de la mano del gestor cultural Santiago Casto, volviendo a ser admiradas y queridas por su calidad interpretativa. Habían vuelto para volar alto y sus discos salían como pan caliente. Las hermanas Espinoza Aybar nacieron en la localidad de Huaytará, región Huancavelica, pero radicaron en Lima.

Una de las voces de este dúo se apagó para siempre, Martha, quien falleció hace nueve años. Isabel aún está con nosotros. Las Golondrinas viven en el recuerdo y en los corazones de un público que las aplaudió vivamente en cada una de sus interpretaciones.

Artículos relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba