A pesar de que no se contaba con un presupuesto aprobado, la Contraloría General de la República, durante la gestión del excontralor Nelson Shack, llevó adelante un proceso para contratar a 4,050 auditores, comprometiendo sus fondos por más de 307 millones de soles.
Según el portal Epicentro, el Informe de Control Específico N.º 006-2025, señala que Schack “aprobó” y “priorizó” el “requerimiento de personal solicitado”. La auditoría detalla que, luego del pedido de Shack para darle “prioridad” al tema, Luis León Iglesias autorizó al gerente de Capital Humano “a proseguir con las acciones para la ejecución” del concurso público.
Toda esta cadena de hechos provocó, según el documento, “la ilegalidad del concurso y de la vinculación de personal, así como la afectación financiera de la Contraloría General de la República”.
De acuerdo con las bases, en el numeral 3.9, el concurso podría haberse cancelado por “restricciones presupuestales”, pero nadie se preocupó por la disponibilidad de fondos, y se procedió a la suscripción de los contratos.
