“Delincuencia se disparó y mata como el virus”
Especialista César Ortiz afirma el próximo gobierno va a tener un dolor de cabeza con la inseguridad ciudadana

POR: GERARDO PORRAS
Uno de los temas menos abordado por los candidatos presidenciales Pedro Castillo (Perú Libre) y Keiko Fujimori (Fuerza Popular) es el de la delincuencia. César Ortiz Anderson, presidente de la Asociación Pro Seguridad (APROSEC), advierte que el nuevo gobierno va a tener un dolor de cabeza serio si no hace realmente un trabajo integral y articulado, porque la situación de inseguridad ciudadana que vive el país es más que preocupante. Afirma que, por ejemplo, ninguno de los postulantes ha dicho cómo va a trabajar las causas del delito, una cuestión que es fundamental.
¿Cuál es la situación de actual de la delincuencia?
La inseguridad ciudadana ha venido creciendo, más aún, acabando esa cuarentena que tuvimos muy fuerte. La delincuencia se disparó, con otros tipos de delitos. La delincuencia es activa, dinámica, cambia de modus operandi.
¿Qué delitos han aumentado?
Vemos que los delitos cibernéticos, fraude, estafa, extorsión, se han triplicado mes a mes. También se han incrementado el raqueteo, el asalto en las calles, el robo a viviendas, el robo de vehículos, la extorsión. La pandemia ha hecho que la delincuencia tenga un comportamiento distinto.
En el Callao también se da una ola de crímenes.
El Callao es un polvorín. Casi a finales del gobierno de Humala, Callao entró en estado de emergencia precisamente por la inseguridad ciudadana. Continuó con Pedro Pablo Kuczynski hasta sus primeros meses y de ahí se levantó. Hoy hay más muertos por la delincuencia armada que en los tiempos en que Humala decretó el estado de emergencia. En el primer trimestre de este año, 2021, en la región Callao ha habido 130 víctimas por armas de fuego, de las cuales 37 murieron y un 79% fueron por ajuste de cuentas, según la policía, 8% fue por asalto y robo.
¿Los candidatos presidenciales han presentado propuestas consistentes en el tema de la inseguridad ciudadana?
Ambos han hablado muchas generalidades, muchas buenas intenciones, no han aterrizado el problema.
¿En el caso de Pedro Castillo?
Por ejemplo, Castillo propone las rondas en la ciudad de Lima, pero las rondas campesinas no son para la ciudad, sino para las zonas rurales, donde el Estado no llega. Los ronderos capturan y hacen justicia a mano propia. Eso sería inviable. ¿Usted se imagina a ronderos trabajando en Miraflores, San Isidro o San Borja? Otra propuesta de Castillo es que los ciudadanos elijamos a las autoridades de justicia, fiscales y jueces, lo cual inviable también, por lo menos con la Constitución del 97. Nuestra ciudadanía está preparada la ciudadanía para poder elegir a sus autoridades judiciales.
¿Keiko Fujimori ha abordado el tema?
Keiko ha dicho que va a construir más penales. Está bien, se necesitan, pero no en tiempos de pandemia cuando la plata no va a sobrar. En el Castro Castro, con total desfachatez, la delincuencia habla por teléfono, por celulares, por internet. Lo que hay que hacer es ordenar la seguridad en los penales. Poner más cámaras, bloqueadores que funcionen.
¿Cómo debería ser el enfoque de los candidatos al respecto?
Lo primero que se tiene que hacer es despolitizar la policía. Está politizada desde el primer gobierno de Alan García, cuando hace la unificación policial (Guardia Civil, Guardia Republicana y PIP). Los fueros de la policía han venido siendo manoseados durante siete gobiernos, incluido este gobierno por encargo del presidente Francisco Sagasti. Lo segundo que tienen que hacer ambos candidatos es aterrizar el tema y ver la manera holística del trabajo, es decir, integral: policía y justicia (Ministerio Público, Poder Judicial y sistema penitenciario).
Con respecto a las causas de la delincuencia…
Ningún candidato ha dicho que va a trabajar las causas del delito. ¿Por qué el delito ha venido incrementándose en los seis últimos gobiernos? ¿Por qué se ha disparado el delito? Hay marginación social, hay violencia familiar, hay falta de trabajo (más ahora en pandemia), la corrupción que es la raíz del mal y que está enquistada en todas instituciones, la educación sin valores, la pobreza… Todo este caldo de cultivo que hay no se está trabajando a nivel de Estado.
¿Qué han hecho los últimos gobiernos?
En los últimos gobiernos solo han puesto parches, han apagado incendios, pero no aplicado una política de Estado clara. Hay que trabajar en la prevención, tanto en la prevención-disuasión desde la misma seguridad pública, como en la policía, los serenazgos, como la propia ciudadanía. Así como se busca prevenir el COVID, también hay que prevenir la delincuencia. Está matando el virus y está matando el delincuente.
¿Qué otras medidas se deberían tomar?
Se necesita una ley del serenazgo, para que los serenos tengan un marco legal para actuar. Para que se le permita al sereno, una vez que esté entrenado, capacitado, supervisado, el uso de armas no letales.
¿Con relación a la delincuencia juvenil?
Tenemos casi un 70% de delincuencia entre los 14 y 25 años. Hay que modificar el Código Procesal del Menor de Edad. Cómo es posible que un sicario de 14, 15 años, que mete ocho o diez balazos y mata a una persona, vaya por ocho años preso nada más y una vez que cumple esos ocho años ya está. La pena debe ser como la del adulto. Los primeros años los cumplirá en Maranguita y el resto de los 35 años que los cumpla en un penal.
La labor policial implica mucho riesgo, ¿cree que necesitan mejores condiciones para realizar su trabajo?
Se tiene que modificar en la actuación con el arma de reglamento que le da el Estado. Hace una semana, un policía fue malherido de bala porque no pudo accionar su arma de fuego por el temor que de que un fiscal lo meta preso. ¿Cómo es posible que el policía tenga que hacer dos disparos al aire, si en dos disparos ya perdió cinco segundos, tiempo que el delincuente aprovecha para matarlo? Hay que proteger la actuación operativa policial. Además, se le debe devolver al policía la facultad de investigar. Porque ahora el que investiga es el fiscal.