
El vocero legal de la Contraloría General de la República, Guzmán Vera, comunicó que la presidenta Dina Boluarte fue sometida a un proceso de fiscalización. Durante este proceso, se verificó que no existía un presunto desbalance en su patrimonio, a pesar del aumento en los últimos años.
Vera explicó que, aunque inicialmente se detectó un posible desbalance, esto se aclaró al encontrar cuentas bancarias no reportadas adecuadamente en las declaraciones juradas de la presidenta. Tras el análisis, se concluyó que no había inconsistencias patrimoniales en su información financiera.
El proceso de fiscalización permitió a Boluarte justificar su incremento patrimonial al presentar toda la información necesaria. Vera destacó que la evaluación integral de los datos es crucial para asegurar la transparencia y el cumplimiento de las normativas en la función pública.