Se está construyendo un muro de concreto de 900 metros en la av. Morales Duárez, como parte del acceso al nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez. Aunque autoridades señalan que es una medida temporal para seguridad y mejora visual, urbanistas del primer puerto han empezado a cuestionarlo.
Denominado por algunos como un “muro de la vergüenza”, se señala que esta construcción busca ocultar la contaminación del río Rímac, basura y precariedad urbana.
El muro estará decorado con paisajes turísticos y permanecerá hasta tres años. Voceros de la Municipalidad del Callao explican que no se puede intervenir con áreas verdes por la inestabilidad del terreno, antes usado como relleno sanitario. (D.C.)
