Lionel Messi ha llevado a alcanzar la gloria a Argentina y de paso ha demostrado que ya no existen dudas: es el mejor de todos los tiempos. Marcó dos goles y fue el conductor de la selección albiceleste que logró levantar la Copa del Mundo (por tercera vez en su historia) al derrotar en penales a Francia luego de empatar 3-3 en 120 minutos de juego.
Sin duda el compromiso jugado ayer podría considerarse la mejor final mundialista de los últimos años y quizá de todos los tiempos. Argentina empezó ganando y estuvo 2-0 arriba en el marcador, pero Francia no bajó los brazos y, de la mano de un fenómeno como Kylian Mbappé, logró empatar en los últimos minutos, con lo cual forzó los dos tiempos suplementarios.
Un jugador clave en el buen arranque de Argentina fue Ángel Di María quien provocó el penal que luego convirtió Messi para el 1-0. El propio ‘Fideo’ puso el 2-0 tras un excelente contragolpe, con lo cual parecía resolver el partido a favor de los rioplatenses. Pero en el segundo tiempo cambiaron las cosas con dos goles de Mbappé: uno de penal y el otro con un derechazo que doblegó las manos del ‘Dibu’ Martínez.
Los 90’ acabaron 2-2 y el partido pasó al tiempo suplementario en el que también hubo goles y emociones.
El 3-2 lo marcó Messi en el segundo tiempo suplementario con remate de derecha tras un rechazo del arquero Lloris, pero Francia no tardó en empatar con otro gol de penal de Mbappé.
Francia pudo ponerse 4-3 en el último minuto del suplementario, pero el ‘Dibu’ Martínez desvió con el pie un balón que iba con destino de arco.
En la tanda de penales Argentina pateó cuatro penales y marcó todos (Messi, Dybala, Paredes y Montiel), mientras que en Francia anotaron Mbappé y Kolo Mouani, pero fallaron Coman y Tchouameni.
Argentina ha logrado su tercer título mundial y Messi ha conseguido un título que el fútbol le debía por ser el mejor de todos.
