Alejandro Sanz se pronunció tras la denuncia presentada por Ivet Playa, aclarando que no es perfecto ni un “miserable”, y pidió respeto ante las acusaciones que afectan su imagen pública. Rechazó cualquier intención de daño.
El cantante expresó que siempre ha actuado con integridad y que las críticas forman parte de su vida pública. Sanz pidió no juzgar sin conocer todos los hechos y resaltó su compromiso con la verdad.
Finalmente, Alejandro Sanz solicitó prudencia y diálogo para resolver el conflicto, enfatizando que su prioridad es mantener una postura respetuosa y transparente frente a sus seguidores y la opinión pública.
