
Todos yacían en un socavón, maniatados y con heridas de bala. Los 13 trabajadores mineros que habían sido secuestrados el 26 de abril por una banda de delincuentes, en la provincia de Pataz, en La Libertad, fueron asesinados. Cabe indicar que los infortunados estaban vinculados a labores legales de minería en convenio con la empresa Poderosa y daban servicio de seguridad a los mineros artesanales.
Las primeras investigaciones apuntaban a que los delincuentes estaban bajo el mando de Miguel Rodríguez Díaz, alias “Cuchillo” y pedían S/ 4 millones para liberarlos, sin embargo, no hubo ningún tipo de negociación y los trabajadores terminaron ejecutados. El analista en seguridad integral, Pedro Yaranga, señaló que esta masacre “es un acto terrorista” perpetrado por pequeñas bandas de delincuentes nativos y algunos exintegrantes de la organización criminal ‘Los Pulpos’, que operan con el mismo salvajismo que las bandas transnacionales.
“Actúan con la escuela que aprendieron de la criminalidad transnacional. La falta de mayor control y un adecuado trabajo de inteligencia les ha permitido recaudar millones de soles con el robo de material con alto contenido de oro, y ese dinero les sirven para corromper a las autoridades. Por eso es que estos delincuentes están reinando en la zona”, dijo a La Noticia.
Yaranga no dudó en calificar esta matanza como un acto totalmente terrorista, el cual hubiese podido evitarse si hubiese un adecuado trabajo de inteligencia y una adecuada estrategia por parte de las autoridades, porque el estado de emergencia declarado en la zona no sirve para nada. Asimismo, dijo que esta matanza y los otros ataques contra la minera La Poderosa, es producto de la mala relación con la comunidad, lo que no ocurre con otras dos mineras medianas que operan en la zona.
“La Poderosa tiene la concesión desde hace 20 años y gracias a la concesión minera es que tratan a los pobladores, que son los propietarios como mineros ilegales y cuando hay estas cosas lo único es a lo más fácil para ellos y para lo político es decirles que estos son mineros ilegales y del lado dejan pues la criminalidad”, explicó.