El ex primer ministro Alberto Otárola ha fortalecido su presencia en el Poder Judicial con el nombramiento de tres personas de su confianza en puestos estratégicos. Esto ocurre en medio de una creciente tensión con la presidenta Dina Boluarte, mientras la titular del PJ, Janet Tello Gilardi, también enfrenta cuestionamientos sobre su continuidad en el cargo.
Uno de los nombramientos más relevantes es el de Claudett Delgado Llanos, quien ahora asume como gerente general del Poder Judicial. Este cargo le otorga control sobre la administración y finanzas del sistema judicial, lo que implica una influencia considerable en su operatividad.
Asimismo, Ana Parí Morales fue designada como gerente de Recursos Humanos, permitiéndole manejar decisiones clave en contrataciones y despidos dentro del Poder Judicial. Esta función refuerza la capacidad de Otárola para consolidar su red de influencia en la institución.
La tercera funcionaria cercana al ex premier es Karina Quinde Mogollón, ahora subgerente de Prensa. Su labor será gestionar la comunicación institucional en un momento delicado para el PJ. Analistas sostienen que estos nombramientos responden a una estrategia para fortalecer la posición de Otárola en su disputa con el Ejecutivo.
