
La presidenta Dina Boluarte anunció una ofensiva firme contra el crimen organizado y la corrupción al asegurar que su gobierno está reorganizando el sistema penitenciario con medidas drásticas, como el traslado de reos peligrosos al penal de máxima seguridad de Challapalca, la realización de operativos inopinados y el endurecimiento de las condiciones carcelarias.
“En nuestro gobierno no hay espacio para que la corrupción haga de las suyas. Si tenemos que separar a alguien de su cargo, lo haremos sin miramientos”, afirmó durante una nueva reunión del Cuarto de Guerra por la seguridad ciudadana, en la que también resaltó que la seguridad nacional no puede ser objeto de “arreglos bajo la mesa”.
Boluarte enfatizó que Challapalca, por sus duras condiciones, es una medida ejemplar pero no suficiente, por lo que se mantendrán las acciones de control y vigilancia extrema en los penales del país. “Nuestro gobierno no tranza con la corrupción, que eso quede bien claro”, remarcó.
La mandataria también destacó el trabajo articulado de las fuerzas del orden, citando como ejemplo la reciente operación contra la banda criminal “Los Injertos del Norte”, presuntamente implicada en el asesinato del cantante de cumbia Paul Flores. “Estas acciones reflejan la estrategia y valentía con que nuestras fuerzas enfrentan al crimen organizado”, subrayó.
Respecto al estado de emergencia en Lima y Callao, Boluarte indicó que se hará una evaluación una vez concluido el plazo, pues el país necesita “datos tangibles y reales, no meras teorías”.
Finalmente, hizo un llamado a la unidad nacional frente a los discursos pesimistas que, según dijo, buscan sembrar miedo en la población con fines electorales. “Quieren que olvidemos quiénes somos: un pueblo valiente y digno. Pero esta democracia es nuestra y la seguiremos defendiendo”, concluyó.