
La presidenta Dina Boluarte anunció que el gobierno está reorganizando el sistema penitenciario, incluyendo el traslado de reclusos de alta peligrosidad al penal de Challapalca. Además, se están llevando a cabo operativos sorpresivos y se están endureciendo las condiciones carcelarias para garantizar el control y la seguridad.
Boluarte también destacó que no hay cabida para la corrupción en su administración y que, si es necesario, separarán a funcionarios sin dudarlo. La seguridad del país no será negociable ni estará sujeta a acuerdos clandestinos, afirmó.
Aunque las condiciones del penal de Challapalca son duras, la presidenta aclaró que estas medidas no serán suficientes por sí solas y se continuará implementando más acciones para mejorar la seguridad en el sistema penitenciario.
Por último, la mandataria indicó que, una vez termine el estado de emergencia en Lima y Callao, se hará una evaluación objetiva, basándose en datos reales y no en teorías.