Al término de la décimo segunda fecha de las clasificatorias sudamericanas, nuestra selección se encuentra en el último lugar de la tabla. En la última fecha doble sólo obtuvo un punto al empatar de local 0 – 0 con Chile que retomó el paso y obtuvo cuatro puntos. El ganador de esta fecha doble ha sido Ecuador que obtuvo seis puntos, al otro extremo se encuentra Colombia que no sumó. Argentina, Uruguay y Paraguay obtuvieron cuatro. Brasil apenas pudo sumar dos puntos mientras que Bolivia y Venezuela obtuvieron un punto cada uno. Luego de esta jornada, Argentina encabeza la tabla con 25 puntos seguida de Uruguay con 20, Ecuador y Colombia con 19, luego Brasil con 18 y Paraguay con 17.
Esas serían las seis selecciones que clasificarían al Mundial y Bolivia con 13 disputaría el repechaje. Eliminadas (por el momento) están Venezuela (12), Chile (9) y Perú (7). El panorama para nosotros es desalentador, hemos perdido siete partidos, empatado cuatro y ganado uno, anotando apenas tres goles en doce partidos y recibido quince goles en contra. Somos la selección que más goles ha recibido y la que menos ha anotado.
Cuando asumió el equipo Jorge Fossati se esperaba que el equipo mejorara y que dejará el último lugar, lo cual sucedió por un pequeño período. Fossati no le ha tomado la mano al equipo y comete los mismos errores que Reynoso al cambiar de posición a algunos jugadores, como es el caso de Luis Advíncula. Contra Chile y Argentina puso de titular a Paolo Guerrero que ya no está para la alta competencia. Los años no pasan en vano. En todo caso podría ingresar los últimos minutos cuando el rival ya haya consumido algo de su físico y no enfrentarlo a jugadores más jóvenes y enteros al inicio del partido. La semana pasada comentamos que uno de los jugadores de más bajo rendimiento contra Chile había sido Sergio Peña y que el director técnico se demoró mucho en cambiarlo, contra Argentina repitió el error. Quispe ingresó por Peña cuando apenas faltaban cinco minutos para que se cumpliera el tiempo reglamentario.
Fossati se ha equivocado en la formación del once titular y se demora mucho en corregir realizando los cambios oportunamente. Perú volvió a la era Reynoso cuando no remataba al arco. El Dibu Martínez fue un espectador privilegiado. Hasta el 20 de marzo no jugará partidos oficiales la selección y se debe aprovechar el tiempo para mejorar el rendimiento del equipo y poder dejar el último puesto, ya no podemos decir clasificar porque hemos quedado muy lejos. Fossati debería renunciar por dignidad y la FPF podría designar a los hermanos Valencia para que se hagan cargo del equipo de todos.
(*) Periodista deportivo
